jueves, 19 de febrero de 2009

coaching electoral

Coaching electoral


Viene a colación por el proceso seguido con un partido de nueva creación, y por lo tanto, sin ningún tipo de experiencia en política. Localidad catalana, con 6.000 habs y un término municipal muy extenso y diseminado en núcleos cuyo origen proviene de las clásicas urbanizaciones de la época del desarrollismo.
Toma de contacto: octubre del 2006, con motivo de la presentación oficial de su programa a las municipales de junio del 2007. Todo empezó con una pregunta que -en privado, naturalmente- le formulé al que parecía encarnar el rol de líder de la formación.
Al poco, acordamos el proceso, sujeto a un CALENDARIO de entrevistas quincenales. Empezamos por componer su mapa de potencialidades e identificar sus fortalezas. Adquirieron el compromiso de lograr una buena organización, considerando la importancia de contar con un lema interno y un conjunto de ideas-fuerza, que nos ayudaran a preparar el asalto al poder.
Asimismo, fijamos nitidamente los objetivos (modelo, programa y lista) y algunos indicadores del éxito para acotar la maniobra. Obviamente, destacaba el referido al nº de ediles, que el más optimista de entre todos ellos cifraba en 5, suficiente para influir, según dijeron entonces, aunque con 3 ya se daban por satisfechos.

Asumido el papel del outsider, al que los periodistas ninguneaban se añadió un cuarto objetivo, centrado en arañar presencia mediática. Esforzándose - superado un cierto tic de conformismo limitador- más que nadie por adquirir notoriedad, se estableció un compromiso de máxima combatividad en este frente.

Llegados a un nivel altísimo de convicción y lejos de la autocomplacencia por todo lo conseguido, el coach les invitó a considerar cuáles eran los aspectos sobre los que incidir -aun- para ganar. Y, claro, nos centramos de lleno en los ejes de la campaña, con revisión constante de los principales mecanismos de funcionamiento interno y externo (web, sobre todo) a cargo del director-responsable de campaña

El resultado sólo cabe calificarlo como espectacular: ¡¡¡6 ediles!!!, a un paso de la mayoría absoluta. Su investidura fue refrendada por el resto de formaciones, excepto por una que se abstuvo. Gobiernan bajo una cómoda minoría.

feedback del cliente:
“Con el coaching, hemos adquirido el dominio del tempo. El coaching nos ha ayudado a disciplinarnos como organización lo que nos ha permitido optimizar recursos y, simultáneamente, garantizar la continuidad del grupo en el futuro, gracias a la delimitación de ámbitos entre partido y gobierno. Hemos alcanzado y mantenido la necesaria velocidad de crucero, cuidando, especialmente, las constantes de proximidad y captación que nos han venido caracterizando. Por otra parte, adquirimos un sólido perfil mediático"

Después de esta experiencia, la pregunta parece obligada: ¿quien puede dudar de la bondad del coaching, independientemente del campo en el que se produzca?

martes, 17 de febrero de 2009

De un día para otro

De un día para otro

Curiosa y ambivalente expresión que -en un instante- puede cambiar su sentido, según donde pongamos el acento de la intencionalidad.

Asi oiremos: "Lo voy posponiendo de un día para otro", sin razones aparentes o mediante excusas baratas. Evidentemente, todo nos hace pensar en algo que se atrasa o pospone crónicamente, postergación, extravío, retardación, rodeo, detención, tropiezo o dispersión.

Por el contrario, si leemos: "Lo resolví de un día para otro" nos resulta indicativo de prontitud, asunto zanjado, situación corregida , objetivo conseguido o logro alcanzado.

La raíz común es el MOVIMIENTO: en el primer caso, nos mantenemos siempre con un pie atrás, en el segundo se ha producido un cambio que desvanece la inacción y hace que experimentemos una reconfortante satisfacción.